El despacho nació con una filosofía de trabajo muy condicionada por la búsqueda de soluciones prácticas que huyan de pleitos largos y sentencias sin utilidad, con genuina vocación de servicio.
Nuestros clientes reciben información actualizada y entendible de su asunto y en todo momento tienen poder de disposición sobre el procedimiento, para no llevarlo más allá de la utilidad práctica -que sólo el cliente puede valorar. Es necesaria una posición cercana a cada cliente, comprendiendo sus necesidades y sobre todo, lo que le mueve a reclamar.
Esta visión es extensiva a las administraciones con que trabajamos, aspirando a proporcionar la máxima calidad, no sólo en la prestación estrictamente jurídica, sino en la gestión remota de la documentación, en la disponibilidad casi inmediata de información sobre los asuntos, con todas las garantías de seguridad y confidencialidad, que sólo los grandes despachos pueden proporcionar; pero con la agilidad de una boutique jurídica.
El ensamble a «SOGA Y TIZON» representa nuestra especialización administrativista, pero también la cohesión con nuestros clientes y transmite de forma gráfica la filosofía del despacho. Podrá hallar una descripción de estos servicios y otros en la página web, pero no dude en contactarnos si desea más información.